Cuatriciclos y médanos en la costa: La dura casualidad que relaciona dos tragedias de correntinos
La tragedia de ayer en Pinamar, que terminó con la vida de una joven mujer correntina, inmediatamente relaciona otro hecho similar y con el mismo fatídico final: en 2016, en Cariló, un chico también correntino murió aplastado por un cuatriciclo.
La muerte de Agustina Queirel (34 años) ocurrida ayer en Pinamar, lleva rápidamente a recordar otra tragedia ocurrida en enero de 2016 en Cariló.
En éste último caso falleció un pibe correntino de 12 años, Nicolás González Vilas, y el hecho destapó una problemática aún no resuelta en la Costa Atlántica: la de la utilización de cuatriciclos para paseos en la zona de médanos, paseos que evidentemente no se dan con todas las garantías de seguridad.
Agustina y Nicolás son dos víctimas correntinas que fallecieron en las mismas circunstancias, con cinco años de diferencia.
La muerte de Agustina
Agustina Queirel tenía 34 años y vivía en Corrientes capital, se había ido a pasar sus vacaciones a la costa bonaerense junto a su pareja y sus dos hijos de 2 y 7 años.
La mujer se encontraba astaba alojada en la localidad Costa Esmeralda pero el paseo terminó en una tragedia en los médanos de Pinamar.
Este miércoles por la tarde, mientras circulaba a bordo de un cuatriciclo sin casco, junto a sus nenes y una amiga de 36 años, el vehículo se dio vuelta en un médano en el extremo Norte de la ciudad, en el límite con Costa Esmeralda y golpeó a Agustina quien murió en el acto.
El caso de Nico
El 7 de enero de 2016 un chico correntino de 12 años, Nicolás González Vilas, murió en Cariló, tras volcar con un cuatriciclo, lo que le provocó lesiones abdominales graves.
El menor circulaba con su cuatriciclo a tres kilómetros del balneario Divisadero de Cariló junto a otros dos amigos que lo acompañaban en otros dos cuatriciclos, quienes no vieron nada porque iban varios metros más adelante que él.
El menor fue trasladado por una familia que circulaba por la zona hasta el hospital de Pinamar.
