Corrientes 22 °C
Min. 14 °CMax. 24 °C
 
Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.radiodos.com.ar/a/139696
Carlos Bramante

Autor

EN LA BÚSQUEDA DE ACERCAR POSTURAS

Reconversión saludable que esperamos en la ciudad y el campo

El tabaquismo se lleva vidas, mientras Corrientes conserva su producción tabacalera. Sigue pendiente un cambio saludable por el escaso resultado de las políticas públicas.

El 31 de mayo es el Día Mundial sin Tabaco y la Organización Mundial de la Salud (OMS) reclamó a los gobiernos que no subvencionen su cultivo sino que promuevan la producción de alimentos saludables.

Así "damos prioridad a la salud, preservamos los ecosistemas y reforzamos la seguridad alimentaria", dijo el director general de la OMS recordando que por el tabaquismo, cada año, mueren ocho millones de personas en el planeta y casi 45 mil en Argentina.

Corrientes supera el millón seiscientos mil kilos de tabaco por año. Disminuyó, con relación a décadas anteriores, pero muchos productores se aferran a la única alternativa rentable frente a políticas de riesgosos resultados. Otros se animaron a cambiar pero, ante las dificultades, volvieron o terminaron enterrando sus sueños.

Tampoco dejemos que los productores correntinos sigan cayendo en la trampa de la industria tabacalera. La OMS denuncia que los atrapan con "un círculo vicioso de endeudamiento para propagar el cultivo, exagerando beneficios económicos y ejerciendo presión con grupos de fachada agrícola".

El organismo sanitario alertó que no solo están expuestos los consumidores sino también los productores de una materia prima nada "inocente". Su cultivo provoca enfermedades, entre los que podrían verse afectados más de un millón de niños.

"Están expuestos a pesticidas, humo de tabaco y tanta nicotina como la que contienen 50 cigarrillos, provocando enfermedades pulmonares e intoxicaciones", especificó un director de la OMS.

No es suficiente lo que se hizo en una provincia que sigue siendo productora por excelencia. La reconversión, principalmente de pequeños y medianos productores, está atada a los traqueteos del campo argentino. Una política de salud pública no puede estar pendiente, de ideologías y coaliciones de turno, que casi nada se renovaron en las últimas décadas.

Pasaron 13 años del conflicto por la famosa "Resolución 125" y la dirigencia no termina de comprender las "miserias" de la mala praxis económica que solo padecen los productores. En Argentina se repiten las dolorosas imágenes de frutas y verduras arrojadas en las rutas para protestar por falta de rentabilidad; mientras la pobreza golpea al 50 % de sus habitantes.

La industrialización es una deuda pendiente mientras seguimos escuchando que la distancia es un impedimento para Corrientes. Comencemos a enterarnos de experiencias competitivas alejadas de Buenos Aires, con pequeños y medianos emprendimientos, animados a romper los nocivos monopolios y/o oligopolios industriales alimenticios.

Demostraciones concretas que no se necesitan inversiones de multinacionales ni de grandes marcas, sino acompañamiento estatal para promover objetivos que igualen o superen en calidad con su producto final.

Desde varias provincias, a más de mil kilómetros de distancia de la gran urbe, se producen y se exportan alimentos a un mundo ansioso por ellos. Incluso, desde geografías más agrestes que la cómoda y regada llanura correntina.

La reconversión y desarrollo de la industrialización pareciera llevar demasiado tiempo aunque presumimos de ser una de las provincias con mayor desarrollo forestal. La manufactura madera tímidamente se exporta pero no alcanza siquiera a ser opción ante el déficit y la precariedad habitacional que golpea cualquier retina con sensibilidad social.

También son ciertas las diferencias notorias entre regiones correntinas. El norte pareciera el más postergado pese a las quejas frecuentes sobre habitantes "adictos" a los planes sociales o al empleo público. Pero es evidente que escasean alternativas productivas perdurables y exentas del azar de los gobiernos de turno.

Otras zonas se despegan de los extensos kilómetros de tierras sin producir, pero los trabajadores padecen precarización laboral y/o trata de personas por explotadores con millonarias ganancias que solo pagan remuneraciones indigentes. Mientras tanto, dirigentes y funcionarios se sorprenden leyendo estadísticas y poco hacen para revertirlas porque siguen encandilados con encuestas electorales.

Vivimos época de elecciones y estos temas están ausentes del debate. Solo escuche a un candidato a diputado provincial sobre la reconversión de productores tabacaleros en Goya. Pese a diferenciarnos del calendario nacional, en Corrientes discutimos preferencias que deberíamos decidir más adelante. Casi contradictorio de los argumentos para agregar turnos electorales.

Las problemáticas relatadas parecen aisladas y hasta "traídas de los pelos" por un drama sanitario. Pensemos sino es una visión errónea y base del fracaso de las escasas y esporádicas políticas aplicadas. Si probamos pensando en un todo, posiblemente comencemos a resolver los problemas vigentes.

Temas en esta nota

Carlos Bramante